¿Qué es el té rooibos? | Tipos de té rooibos | Sabor del té rooibos | Beneficios del té rooibos | Cómo preparar té rooibos | Otras formas de disfrutar el rooibos

El té rooibos se está convirtiendo en una de las infusiones preferidas para aquellos que buscan bebidas saludables y libres de cafeína. Esta bebida tradicional sudafricana deleita los sentidos con su intenso color rojo y una mezcla de sabor dulce, ahumado y herbal.

En este artículo te cuento todo sobre esta venerada bebida africana: los tipos de rooibos, su sabor, sus increíbles beneficios para la salud y los mejores consejos para prepararlo como un profesional.

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¿Qué es el té rooibos?

El té rooibos es originario de África, donde se cosecha desde hace más de 300 años. La planta del rooibos crece exclusivamente en la región montañosa de Cederberg, en Sudáfrica.

El té rooibos se llama comúnmente “red bush tea”, que significa literalmente “té de arbusto rojo". El término "rooibos" está protegido legalmente en Sudáfrica desde 2013. De esta forma, solo pueden etiquetarse como té rooibos si las hojas proceden directamente de la planta del rooibos, conocida botánicamente como Aspalathus linearis.

Tipos de rooibos y producción

Hay dos tipos principales de té rooibos: rooibos rojo y rooibos verde. Ambas variedades proceden de la misma planta, pero se someten a métodos de producción diferentes. Al igual que ocurre con el té, dependiendo del grado de oxidación al que se sometan sus hojas se obtienen diferentes tipos de té.

Las hojas de té rooibos rojo se recolectan y se oxidan para producir unas hojas de profundo color granate. El rooibos rojo suele denominarse rooibos tradicional o simplemente rooibos y es el más conocido y consumido.

Las hojas de rooibos verde no se oxidan y se someten a un proceso de producción similar al del té verde. Las hojas se cosechan y se secan para evitar la oxidación.

Los tés rooibos se clasifican en función de la proporción de hojas y tallos de cada lote. Los tés rooibos de mayor calidad contienen principalmente hojas y suelen tener un mejor sabor, un regusto más suave y un color más oscuro.

¿Cómo sabe el té rooibos?

El té rooibos rojo tiene un perfil de sabor y color similar al de la infusión de flor de hibisco. Presenta notas florales, un final ligeramente ácido y un color rojo intenso. Dependiendo del tiempo de oxidación puedes encontrar rooibos con sabores más ahumados o con notas de miel, caramelo y vainilla.

El rooibos verde tiene un sabor mucho más herbal, pero a diferencia del té verde no es nada amargo ni astringente. Al igual que el rooibos rojo, el rooibos verde tiene un sabor dulce y con cuerpo, pero es más ligero y menos complejo. Su sabor se parece al de la yerba mate.

El rooibos no contiene teína

El té rooibos no contiene cafeína o teína, lo que lo convierte en una opción ideal como té base para las infusiones aromatizadas y de hierbas. Esta infusión de color intenso y con cuerpo se utiliza habitualmente como alternativa al té negro, ya que su versatilidad permite prepararlo de múltiples formas, como veremos más adelante, sin las contraindicaciones asociadas a la teína.

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Beneficios del té Rooibos

Estos son los beneficios para la salud del rooibos más estudiados en los últimos años:

  • Tiene un gran contenido en antioxidantes
  • Es muy digestivo
  • Ayuda a reducir la “hormona del estrés”, el cortisol
  • Reduce la sensación de hambre, por lo que es un buen complemento para adelgazar
  • Es broncodilatador, ayudando a reducir la congestión y la tos
  • Es antiinflamatorio

Para obtener estos beneficios para la salud, la mejor opción es optar por un té rooibos con certificación ecológica. Así te asegurarás de que tu té está libre de productos químicos nocivos que pueden tener efectos secundarios a largo plazo.

También es recomendable optar por el té a granel en lugar del té en bolsitas. Esto se debe a que los tés a granel contienen las hojas completas de la planta del rooibos y, por tanto, todos los nutrientes y compuestos saludables. El té a granel también produce un mejor sabor y una experiencia más satisfactoria.

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¿Por qué Té Ecológico?

¿Cómo preparar el té rooibos?

El té rooibos es muy fácil de preparar, no teniendo que controlar tanto el tiempo y temperatura de infusionado como con los tés convencionales. Así que, aunque se te olvide retirar las hojas de rooibos del agua , este no se volverá amargo.

El rooibos suele disfrutarse de formas similares al té negro, acompañándolo de un poco de leche y miel. También se puede preparar frío o hacer deliciosos lattes

Instrucciones

  1. Calienta el agua en un hervidor o cazuela pequeña hasta que llegue a hervir.
  2. Añade dos cucharadas pequeñas de rooibos a tu infusor y colócalo en la taza.
  3. Vierte el agua y deja reposar entre 5 y 10 minutos. Si lo dejas más tiempo el sabor será más intenso.
  4. Puedes beberlo así o añadirle una rodaja de limón, miel o un poco de leche.

Otras formas de disfrutar del té rooibos

Rooibos Vainilla Iced Tea Latte

El rooibos con vainilla es una de las mezclas más habituales y deliciosas que puedes encontrar. Para esta receta hemos usado el Rooibos con Vainilla y Caléndula Ecológico de Replantea.

Ingredientes

  • 250 ml de Agua
  • 2 cucharadas pequeñas de Rooibos con Vainilla y Caléndula
  • 1 cucharada pequeña de Miel
  • 200 ml de Leche de tu elección (con leche de almendra está delicioso)
  • Hielo

Instrucciones

  1. Prepara el té rooibos como hemos explicado anteriormente y déjalo enfriar 10 minutos.
  2. Añade la miel y mezcla bien.
  3. Déjalo enfriar en la nevera hasta el momento de servir.
  4. Combina el té con la leche en una jarra de cristal.
  5. Sírvelo en vasos altos con mucho hielo. Puedes adornar con una ramita de canela.

Té Chai Rooibos

Puedes preparar un excelente té chai sin teína sustituyendo el té negro por el rooibos. Para esta receta también puedes usar el Rooibos con Vainilla y Caléndula.

Ingredientes

  • 6 tazas o 1,5 litros de Agua
  • 3 cucharadas pequeñas de Té rooibos
  • 1 cucharada pequeña de Clavo
  • 10 vainas de Cardamomo
  • 1 cucharada pequeña de Pimienta negra en grano
  • 1 rama de Canela
  • 1 trozito de Jengibre

Instrucciones

  1. Muele todas las especias con un molinillo o mortero. También puedes usar especias ya molidas.
  2. Añade las especias y el agua a una cazuela y llévala a ebullición.
  3. Añade el rooibos y déjalo cocer a fuego medio durante 15 minutos
  4. Cuela el té chai con un colador de malla fina y viértelo sobre las tazas
  5. Puedes añadir una rama de canela para decorar y acompañarlo con un poco de leche si así lo deseas.

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